Pregunta
Promesa
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La corrección de cicatrices es un procedimiento de cirugía menor ambulatoria que se realiza con anestesia local y elimina cicatrices provocadas por traumatismos, quemaduras o secuelas de cirugías anteriores.
En muchos casos las marcas cicatrizales provocan problemas más allá de lo estético, dependiendo de su ubicación generan dificultades funcionales al limitar la flexión y extensión de la zona, pero lo que es más preocupante es el trauma que traen consigo a nivel de aceptación de la propia imagen, lo que pueden acarrear complejos e inseguridades importantes.
¿Por qué aparecen las cicatrices?
Las cicatrices son el resultado del proceso natural de curación de la piel tras sufrir un corte, quemadura u otra lesión. Durante este proceso, el cuerpo produce colágeno para reparar los tejidos dañados. Sin embargo, factores como la gravedad de la herida, la genética y los cuidados postoperatorios pueden influir en la apariencia final de la cicatriz.
¿Cómo se corrigen las cicatrices?
Aunque existen diferentes técnicas, es nuestro equipo de cirugía el responsable de valorar tú caso y establecer el mejor protocolo según el tipo de cicatrices; hipertróficas, queloides, atróficas o hiperpigmentadas.
En la clínica Dra. Blanco tratamos constantemente cicatrices de múltiples orígenes; cesáreas con secuelas antiestéticas con efecto de tensión, cirugias mamarias o abdominoplastias con acabados antiestéticos, quemaduras, cicatrices en antebrazos por corte, rostros con cicatrices traumáticas, etc.
El tratamiento idóneo para cada caso puede conllevar más de un procedimiento, que reaccionan sinérgicamente para conseguir resultados perfectos. Según el origen, el tipo de cicatriz, su antigüedad o extensión el médico estético creará un protocolo específico para tú caso, puede incluir el uso de energía láser, peelings o dermoabrasión.
Pero es la cirugía menor ambulatoria por resección la técnica ideal para minimizar incluso, cicatrices de mayor tamaño y consiste en la eliminación del tejido cicatricial quirúrgicamente. Una vez eliminado ese tejido, se suturan los bordes con sutura intradérmica. La intervención se realiza con anestesia local y tiene una duración de entre 30 a 60 minutos dependiendo de la complejidad de la cicatriz. Generalmente estos puntos de sutura se retiran pasados unos 10 días. A partir de ese momento se aprecia una clara mejora de la zona tratada que evolucionará durante los siguientes meses hasta convertirse en una fina línea casi imperceptible.
En muchos casos el médico especialista optará por combinar el tratamiento con procedimientos que potencian y aceleran el proceso como inyecciones de corticoides, carboxiterapia o tratamientos que estimulan la nueva cicatrización.
Siempre dependiendo de la ubicación y la longitud de la cicatriz la incorporación a la rutina habitual es muy rápida.
Cuidados y Recomendaciones post-operatorios
Los primeros 10 días después de la intervención conllevan una leve disminución de la actividad física, es importante evitar la sudoración excesiva, roces o golpes.
Durante este periódo no es recomendable exponer la zona a la humedad.
Es importante eliminar la ingesta de aspirina o medicamentos que contengan ácido- acetil- salicílico.
En algunos casos es necesario el vendaje de la zona o realizar curas.
En cualquier caso, pasados unos 10 días el cirujano evaluará la evolución de la cicatrización.
La nueva cicatriz es extremadamente sensible a la exposición solar por ello debe protegerse el área durante un largo periodo de tiempo.